Extraído boletín
de la Institución Mayo 1966-Redactor Responsable: Felipe Maroño.
Siguiendo al Montevideo White Sox
El día 23 de
abril de 1966, dio comienzo al Campeonato Uruguayo de Béisbol, correspondiente
a la temporada 1965/66, teniendo la novena de nuestra institución, que dirimir
supremacías frente al Club Halcones.
El resultado fue
favorable al club de la Avenida Centenario, por 5 carreras a 1., epílogo
totalmente justo y que premia los mejores merecimientos expuestos en el
diamante por los bravos muchachos que orienta el capacitado pitcher Juan
Fernando Magnou, verdadera sensación de la presente temporada.
Cabe hacer notar
que este player formó su personalidad deportiva vistiendo los colores del White
Sox en un período de 10 años y en esta lo hace con mucho éxito en filas del
club amigo Halcones.
El segundo
compromiso por el Campeonato Uruguayo tuvo por escenario el diamante del White
Sox sito en la Aduana de Oribe, en este evento tuvimos de rival al equipo de
Sakura integrado por elementos de la colonia japonesa.
Reinaba gran
expectativa en este juego, pues se
rumoreaba que se producirían en la novena de los medias blancas fundamentales
cambios en integración para dotar al equipo una mayor travazón, una cohesión de
la que carecía en juegos anteriores, pues la … radicaba en obtener resultados
favorables en base a individualidades, solo se obtuvo fracasos transitorios
pero al fin desalentadores.
En un partido de
trámite sencillo pero de positivos resultados, el club se impuso por 7
carreras a 3, triunfo que abre enormes
esperanzas, que devuelven la confianza a jugadores y fanáticos que confían en
obtener el lauro máximo al término de este campeonato uruguayo.
Observando desde
barreras el juego de nuestros defensores, se nota la obra emprendida por el
binomio técnico integrado por el coach Muñoz y el asistente técnico Efrain
Graziani, gran colaborador del capacitado entrenador tejano.
En general los
players batearon con gran regularidad, robaron bases en buen momento y se
sobrepusieron a un incidente que protagonizó el planillero de Sakura que quería
hacer en la planilla, las carreras que no hacían en la cancha sus
connacionales.
Merecer palmas
por su buen momento, el “Colorado” Horacio Vaccarezza, el cátcher “Bob”
Williams, la pantera negra, que posee un muy buen brazo para el pase, rapidez
en el robo de bases, viveza para seguir el trámite del partido.
En los fielders
se lucieron, el impasable Pinelli y el americano John Enger por su robo de bases.
Acompañaron los
demás en un mismo plano de eficacia, verbigracia, Rubén y Héctor Buono, Frank Skinner, Rodestop, Bill
Rappold, que uniendo entusiasmo y su ansia, le ganaría a su pulida técnica,
conformaron una perfomance que da tranquilidad suficiente para esperar el
compromiso frente al campeón Oriental con lógica confianza.
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