¡
Hola !
Antes que nada, mis disculpas por no haber contestado inmediatamente pero, como
sabrá, uno va dejando para después, mañana, la semana que viene y
......................
Si mi sorpresa fue grande, la emoción todavía me dura mientras le escribo. De todas maneras, la gran sorprendida fue mi mujer, Henar, "¿Jugabas al beisbol?" Me lo preguntó un par de veces, "Quiero ver fotos" y, lamentablemente, no tengo ninguna. Si sé a quién le dí las que tenía y, como debe ser, nunca me fueron devueltas. También el después, mañana, hago copias........ Supongo, de todas maneras, que el que más se va a sorprender será mi hijo.
Después de aquél campeonato, que se jugó en las canchas de lo que fue la Escuela Militar, un día, sin saber el por qué, todo eso se fue diluyendo y, casi sin darnos cuenta, todos nos fuimos alejando del grupo aunque no nos fuimos del barrio pero, "enfilamos pa´otros pagos" y, si mal no recuerdo, unos años, no muchos, alguno emigró del país. Estudios, trabajos, otras perspectivas que tenían que ver con la evolución personal e, incluso, alguna novia. Vamos, la vida misma.
No estoy seguro, pero es probable que jugara, algún partido con un equipo de jóvenes de familiares de la embajada de E.E.U.U. Como soy zurdo, esa fuela razón que me dieron, jugaba de primera base.
Volviendo al tema material, mis foto se las dejé a, creo recordar, le decíamos Cacho, tenía un apellido italiano y vivía por Rivadavia, de Garibaldi hacia Paullier, en la casa de al lado de los Gago, el constructor, que tenía dos hijas, Lucero es la mayor y no recuerdo el nombre de la otra.
En las múltiples vueltas a Montevideo a través de tantos años, alguna vez ví a Lucero, pero no hablé con ella y, estoy seguro, que si ella me vió no me reconoció.
Como podrá imaginar, por el más remoto de mis pensamientos pasó la idea, o posibilidad, de que siguiera existiendo los PANTERAS BEISBOL CLUB.
Considero sus elogios inmerecidos y exagerados. De todas maneras, como dice el refranero español, es de bien nacido ser agradecido. Muchas gracias.
Espero que la poca información que le aporté le sirva. Quisiera, de ser posible, me mantenga informado sobre la evolución del PANTERAS BEISBOL CLUB.
La próxima vez que vayamos a Montevideo intentaré ponerme en contacto con usted. Será un gusto poder saludarle personalmente.
Que todo vaya muy bien. Con mis mejores deseos. Saludos a la gente del club.
Un abrazo
Ruben Tobías.
Si mi sorpresa fue grande, la emoción todavía me dura mientras le escribo. De todas maneras, la gran sorprendida fue mi mujer, Henar, "¿Jugabas al beisbol?" Me lo preguntó un par de veces, "Quiero ver fotos" y, lamentablemente, no tengo ninguna. Si sé a quién le dí las que tenía y, como debe ser, nunca me fueron devueltas. También el después, mañana, hago copias........ Supongo, de todas maneras, que el que más se va a sorprender será mi hijo.
Después de aquél campeonato, que se jugó en las canchas de lo que fue la Escuela Militar, un día, sin saber el por qué, todo eso se fue diluyendo y, casi sin darnos cuenta, todos nos fuimos alejando del grupo aunque no nos fuimos del barrio pero, "enfilamos pa´otros pagos" y, si mal no recuerdo, unos años, no muchos, alguno emigró del país. Estudios, trabajos, otras perspectivas que tenían que ver con la evolución personal e, incluso, alguna novia. Vamos, la vida misma.
No estoy seguro, pero es probable que jugara, algún partido con un equipo de jóvenes de familiares de la embajada de E.E.U.U. Como soy zurdo, esa fuela razón que me dieron, jugaba de primera base.
Volviendo al tema material, mis foto se las dejé a, creo recordar, le decíamos Cacho, tenía un apellido italiano y vivía por Rivadavia, de Garibaldi hacia Paullier, en la casa de al lado de los Gago, el constructor, que tenía dos hijas, Lucero es la mayor y no recuerdo el nombre de la otra.
En las múltiples vueltas a Montevideo a través de tantos años, alguna vez ví a Lucero, pero no hablé con ella y, estoy seguro, que si ella me vió no me reconoció.
Como podrá imaginar, por el más remoto de mis pensamientos pasó la idea, o posibilidad, de que siguiera existiendo los PANTERAS BEISBOL CLUB.
Considero sus elogios inmerecidos y exagerados. De todas maneras, como dice el refranero español, es de bien nacido ser agradecido. Muchas gracias.
Espero que la poca información que le aporté le sirva. Quisiera, de ser posible, me mantenga informado sobre la evolución del PANTERAS BEISBOL CLUB.
La próxima vez que vayamos a Montevideo intentaré ponerme en contacto con usted. Será un gusto poder saludarle personalmente.
Que todo vaya muy bien. Con mis mejores deseos. Saludos a la gente del club.
Un abrazo
Ruben Tobías.
*Agradecemos la respuesta que nos enviara nuestro estimado Rubén Tobias, es una alegría saber que es uno de los fundadores de nuestra Institución. A través de ella nuestros colegas van tomando conocimiento de los primeros jugadores que participaron en representación del Panteras Béisbol Club de un torneo nocturno en la ex Escuela Militar (Enero/1958).
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